Una escápula infantil de Homo antecessor, principal hallazgo de la 'Campaña de Excavaciones 2013' en Atapuerca
La escápula perteneció a un niño o niña de entre cuatro y seis años y representa una gran oportunidad de investigar sobre el desarrollo y la locomoción de esta especie Fundación Atapuerca
La campaña de excavaciones 2013 en los Yacimientos de Atapuerca comenzó el pasado 1 de julio y han estado dirigidas por Juan Luis Arsuaga, José María Bermúdez de Castro y Eudald Carbonell. Tras casi 4 semanas de excavaciones el Equipo de Investigación de Atapuerca (EIA) detalla el balance de los hallazgos más destacados en cada uno de los yacimientos en los que ha trabajado. Presentación de una escápula de Homo antecessor En 2005 se produjo el hallazgo en TD6 de Gran Dolina de una escápula infantil de Homo antecessor, cuyo estudio se presumía muy complejo, dado que el fósil se encontraba literalmente incrustado en un bloque de arcilla calcificada. Después de siete años de paciente trabajo, el equipo de restauración del Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES) de Tarragona ha conseguido liberar este resto fósil tan peculiar, que se presenta por primera vez en sociedad. En el registro fósil de los homininos arcaicos tan sólo se conocen las escápulas de un individuo inmaduro de unos tres años de edad, perteneciente a la especie Australopithecusafarensis, localizado en la localidad de Dikika, en Etiopía. La escápula de Homo antecessor perteneció a un niño o niña de entre cuatro y seis años y representa una gran oportunidad de investigar sobre el desarrollo y la locomoción de esta especie. Una vez finalizado su estudio, el EIA considera que, por su rareza, este fósil merece ser expuesto en el Museo de la Evolución Humana, según informa Fundación Atapuerca. YACIMIENTOS DE LA TRINCHERA DEL FERROCARRIL Sima del Elefante El resultado más destacado de esta campaña de excavación en la Sima del Elefante es el hallazgo de una pieza de industria lítica en sílex cretácico del Modo 1 en el nivel TE8. El nivel TE8 se localiza por debajo del nivel TE9 (datado en 1,2 Ma) donde en el año 2007 apareció la mandíbula humana más antigua de Europa. En consecuencia, el EIA considera que con este hallazgo nos acercamos al límite aceptado para la primera ocupación de Europa Occidental que se sitúa en 1,5 millones de años. "En estos momentos podemos decir que los objetivos planteados al inicio de la campaña de excavación han sido cumplidos de forma satisfactoria", según el EIA. GRAN DOLINA (Nivel TD10) Un equipo de 25 personas ha estado excavando en la parte superior del yacimiento de Gran Dolina, en una superficie de 80 metros cuadrados. Concretamente, se ha trabajado en la base el nivel TD10-2, de unos 400.000 años de antigüedad. Este nivel se empezó a excavar en 2004 y desde entonces ha proporcionado un riquísimo registro fósil, con más de 60.500 restos faunísticos y 12.000 herramientas de piedra. El gran paquete de sedimentos contenido en el nivel TD10 se caracteriza por presentar las mayores concentraciones de restos arqueológicos documentados hasta la actualidad en los yacimientos pleistocenos de la Sierra de Atapuerca. Estos restos se acumularon en la entrada a la cueva de Gran Dolina a lo largo de los períodos en que ésta fue usada por los homínidos como enclave referencial dentro del entorno de la sierra. En la unidad TD10.2, la que se ha acabado de excavar en esta campaña, se ha puesto al descubierto que la cueva fue ocupada por unos grupos humanos extremadamente especializados en la caza y procesado de bóvidos. La excavación de las unidades TD10.3 y TD10.4 en las próximas campañas permitirá entrar de lleno en el mundo Achelense, del que existe también información relevante en el yacimiento de Galería y, por supuesto, en el completo registro paleoantropológico de la Sima de los Huesos. Poniendo en relación la información relativa a este período (el comprendido entre los 500.000 y los 400.000 años) el EIA podrá reconstruir como en ningún otro lugar de Europa tanto los aspectos biológicos como culturales de Homo heidelbergensis. Sector inferior. Gran Dolina hace un millón de años. El nivel TD4 La industria lítica recuperada durante esta campaña en el nivel TD4 de la Gran Dolina, con una antigüedad aproximada de un millón de años, confirma la continuidad del poblamiento humano en Europa desde que este se originó hace aproximadamente 1,5 millones de años hasta la aparición de Homo antecessor, hace unos 850 mil. Se contradicen, por tanto, las hipótesis planteadas por algunos investigadores que explicaban el primer poblamiento de Europa a partir de la sucesión de pequeñas oleadas de homínidos sin continuidad en el tiempo y condenadas a la extinción ante su incapacidad de adaptarse a los nuevos espacios. Aunque se trata de una industria lítica muy arcaica, ésta ya refleja el desarrollo de actividades complejas, como el aprovechamiento de animales caídos en las torcas. Estas actividades implican un cierto control del territorio, al ser necesario leer e interpretar las señales que se producen en el medio cuando un animal cae en una trampa de este estilo, tales como los bramidos de los propios animales o el revoloteo de aves carroñeras en las inmediaciones. Pero sin duda, el rey de las cuevas de Atapuerca hace un millón de años fue el Ursus dolinensis, un oso de gran tamaño antepasado directo de los futuros osos de las cavernas (Ursus spelaeus) y muy cercano al ancestro común de los osos pardos actuales. De esta especie se han encontrado varios restos junto al de otros animales como rinocerontes, cérvidos gigantes, gamos, bisontes y asnos silvestres. GALERIA La campaña de 2013 en el yacimiento de Galería se ha centrado en la excavación del subnivel GSU-3. Este subnivel, datado entre 220.000 y 240.000 años, pertenece a la Unidad GIII. Se han recuperado restos faunísticos y algunas herramientas en sílex y arenisca correspondientes a las últimas ocupaciones de Galería. Estas ocupaciones, que eran esporádicas, estaban enfocadas al aprovechamiento de los animales que caían a través de la trampa natural situada a la derecha del yacimiento; así lo atestiguan las marcas de corte y las evidencias de fracturación que se han identificado en los restos óseos. Los restos recuperados pertenecen principalmente a ciervos y caballos aunque también se han recuperado restos de bisonte. Entre los hallazgos de esta campaña, destaca la recuperación de restos pertenecientes a dos leones en una de las zonas próximas al techo de la cueva. Uno de ellos es un cráneo prácticamente completo de un individuo adulto, probablemente una hembra, y el otro es la mandíbula de un cachorro de unos 6 meses. YACIMIENTOS DE CUEVA MAYOR En la campaña de este año se ha intervenido en tres yacimientos enclavados en el interior de la Cueva Mayor de la Sierra de Atapuerca: Portalón, la Galería de las Estatuas y la Sima de los Huesos. PORTALÓN Durante la presente campaña se han finalizado los trabajos de excavación de los niveles Calcolíticos iniciados en la campaña del 2012, documentándose un contexto funerario con inhumaciones humanas acompañadas de elementos de ajuar como recipientes cerámicos, industria lítica (puntas de flecha y láminas de sílex) y ósea (punzones y pasadores), animales domésticos (ovicápridos y suidos), objetos de adorno (colgantes y conchas) y abundantes hogueras. Se ha empezado a descubrir el nivel neolítico, que se espera que proporcione mucha información en las próximas campañas sobre los primeros agricultores y ganaderos de la Meseta y de la Península. Para poder alcanzar este nivel ha sido necesario evacuar grandes bloques de caliza que cubrían el yacimiento y que corresponden a una caída del techo de la cueva. El Portalón puede ser un yacimiento de referencia para conocer a los últimos cazadores y recolectores y el tránsito a la economía de producción. SIMA DE LOS HUESOS Los trabajos en Sima de los Huesos se han centrado en estudios geológicos y topográficos del yacimiento y de la sala aledaña de Cíclopes. Las excavaciones han tenido como objetivo prioritario preparar las secciones para muestreos de geocronología que se están llevando a cabo. Se ha avanzado mucho en la comprensión de la secuencia estratigráfica y procesos geológicos de formación del yacimiento, con el propósito de establecer el contexto en el que se produjo la acumulación de restos humanos y precisar mejor su datación. Se espera publicar estos resultados en los próximos meses, junto con las reconstrucciones de fósiles humanos realizadas, en los próximos años. En la Galería de las Estatuas (ocupación neandertal) los objetivos de la campaña han sido similares, con un carácter más geológico que arqueopaleontológico. CUEVA DEL MIRADOR En el yacimiento del Mirador siguen exhumándose cadáveres de un grupo de unos veinte individuos del Calcolítico (Eneolítico), cuya antigüedad se ha estimado en 4.700 años antes del presente. Los restos se encuentran amontonados, aunque parece tratarse de diferentes inhumaciones ocurridas a lo largo del tiempo. Algunos de los cadáveres están en conexión anatómica, mientras que otros se hallan dispersos. Es importante destacar las investigaciones que se vienen realizando sobre el ADN mitocondrial de estos cadáveres, en fase muy avanzada, por parte del Dr. Carles Lalueza del Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Esta investigación quedará completada con los datos que se obtengan en la presente campaña. Además de las conclusiones que dichas investigaciones puedan aportar sobre el poblamiento de la península Ibérica, está prevista una comparación con el ADN de personas del entorno de la sierra de Atapuerca, cuya genealogía se remonte a varias generaciones. Se pretende llegar a enlazar el pasado con el presente, y demostrar una posible continuidad y escasa movilidad de las poblaciones del neolítico, eneolítico, edad de los metales, edad media, etc. en la Meseta Norte hasta llegar a tiempos recientes. Por otro lado, entre los restos hallados en el grupo humano que está siendo excavado en estos momentos destaca el esqueleto de un varón joven de unos veinte años de edad, cuyo cráneo presenta una perforación en su parte posterior de algo más de un centímetro de diámetro. La perforación se encuentra entre los dos parietales, a varios centímetros del occipital. Este esqueleto se encontró in-situ (no fue exhumado antes de que lo hiciera el equipo investigador). No se observan signos de regeneración ósea, mientras que faltan algunas láminas de hueso en la zona afectada. Por todo ello, se trata de una perforación del cráneo producida justo antes o justo después de la muerte (peri-mortem). Aunque este caso requiere un estudio en detalle, con realización de tomografía computerizada, se pueden aventurar varias hipótesis. Si la perforación fue realizada en vida, es evidente que este varón murió como consecuencia del trauma causado en el cerebro. Puede tratarse de un acto violento, pero también de un intento de curación. Unos centímetros por debajo de esta perforación se observa un hundimiento puntual del cráneo, quizá producto de otra perforación, pero totalmente cerrado y con signos de regeneración ósea. Si la perforación ocurrió justo después de la muerte, también se pueden proponer varias hipótesis, incluido algún tipo de ritual funerario. En definitiva, la cueva del Mirador está ya ofreciendo una visión muy completa de las poblaciones del Calcolítico y promete convertirse también en un referente de esta época en la península Ibérica. ASENTAMIENTO AL AIRE LIBRE. FUENTE MUDARRA Durante esta campaña de excavación, un equipo de 15 personas ha estado trabajando en Fuente Mudarra, asentamiento al aire libre de la sierra de Atapuerca, en el que se comenzó a excavar el año pasado. Este lugar se localiza a orillas del río Pico y desde allí se controla su valle. Se trata de uno de los sitios al aire libre con ocupaciones neandertales que hay en el entorno de las cuevas. Fuente Mudarra tiene varios niveles arqueológicos que confirman la presencia de grupos neandertales en la sierra de Atapuerca durante decenas de miles de años en el Pleistoceno superior. Este mes de julio se ha intervenido en un nivel de 50.000 años de antigüedad en el que se han recuperado herramientas de piedra, de sílex y cuarcita, que estos grupos de cazadores y recolectores fabricaban y utilizaban en su vida cotidiana. LAVADO DE LOS SEDIMENTOS DE LAS EXCAVACIONES DE LA TRINCHERA EN EL RÍO ARLANZÓN Como cada año un equipo de unas 15 personas, dirigido por la Dra. Gloria Cuenca de la Universidad de Zaragoza, se instala en las orillas del río Arlanzón a su paso por Ibeas de Juarros para lavar y triar todo el sedimento originado en los yacimientos de la sierra de Atapuerca. El lavado de sedimentos sirve para recuperar la microfauna de Atapuerca, es decir los diminutos fósiles de mamíferos, anfibios, aves, reptiles y peces de los yacimientos de Atapuerca. Empezó como cada año, el primero de julio.